La seguidilla de hechos de inseguridad que se están registrando en la Isla del Río Diamante en el último tiempo, llevaron a una treintena de vecinos a reunirse para determinar qué hacer con este flagelo, confirmó Al Filo de La Ley.
Tal como reflejamos durante la semana, los robos, asaltos, enfrentamientos armados y agresiones a vehículos desde los puentes, han causado que la Isla sea, hoy por hoy, un terreno indominable y víctima de la ausencia de un Estado que no ha aplicado las medidas correspondientes para contrarrestar este presente.
Lisa y llanamente, el presidente de la Unión Vecinal de ese populoso barrio, de apellido Osorio, mediante un petitorio, que fue acompañado por la firma de varios habitantes del lugar, solicitó la presencia de la Gendarmería Nacional para intentar frenar el accionar delictivo.
En principio, el pedido iba ser enviado al jefe de la Seccional San Rafael, Pedro Palomo, para que este traslade el mismo al titular del Escuadrón 29 de Malargüe, principal Amadeo Rodríguez.
En dicha misiva se detalla que, en caso de prosperar esto, los efectivos tengan su base en donde hoy funciona el Salón de Usos Múltiples de callejón Amapolas, blanco de innumerables e incomprensibles actos vandálicos.
Está claro que pedir los servicios de esta fuerza de seguridad no consta nada más que de una nota firmada por vecinos del lugar, dado que su presencia está sujeta a la aprobación de distintos sectores del Estado, en este caso el Ministerio de Seguridad de la Provincia, por nombrar alguna de las partes intervinientes.
Sin embargo, la lectura que se puede hacer de esta solicitud es de impotencia y desesperación, ya que pasan los días, continúan los hechos delictivos y nadie apunta a una firme decisión para revertir la historia.
Pero claro, la idea de que Gendarmería se instale en la Isla no es vista con buenos ojos por todos. Por ejemplo, en diálogo con Al Filo de La Ley, la concejal Jaqueline Rebolledo, integrante del bloque del Partido Justicialista y vinculada al barrio en cuestión, señaló temer a la posible “represión” por parte de gendarmes en caso de que estos desembarquen allí y recordó que “son muchos los menores que habitan en el lugar”.
No obstante, la edil confirmó que habrá una nueva reunión la semana próxima, donde se reclamarán medidas urgentes para frenar la inseguridad en el barrio, aunque Rebolledo opta por una mayor presencia policial y no de Gendarmería.
Y recordó algo a lo que nos hemos referido en varias oportunidades: “acá en la Isla el 90 por ciento de la población es trabajadora”.
El accionar policial
La Policía tampoco pasó desapercibida en este encuentro vecinal y se puso énfasis en que es necesario una mayor presencia de la fuerza en el barrio.
Según confirmó este blog, un efectivo que se acercó hasta la reunión aseguró que de la guardia permanente que la Comisaría 38 tiene que realizar en zonas como la Isla, El Molino, Pobre Diablo y Cuadro Benegas, solo forman parte 3 uniformados, un número increíblemente pequeño si se tiene en cuenta los sectores que tiene a cargo dicha dependencia policial.
Por este motivo, seguramente se solicitará la presencia para la próxima semana del titular de la Jefatura Departamental de Policía, comisario Carlos Mugneco, a quien se le pedirá mayor cantidad de efectivos para cuidar, en este caso, la Isla del Río Diamante.
Una semana clave
Sin duda que este pedido de los vecinos de la Isla traerá “mucha tela para cortar” en los próximos días e instalará en la sociedad sanrafaelina el acuerdo y desacuerdo en que una fuerza como Gendarmería diga presente en ese sector donde habitan más de 9 mil personas.
Es necesario que la solución a las problemáticas de inseguridad la Isla llegue lo más rápido posible y por parte del Estado, para que de una vez por todas los vecinos que allí trabajan diariamente para “llevar el pan a su casa” dejen de ser rehenes de una delincuencia que, actualmente, GOBIERNA el barrio.
